miércoles, 25 de noviembre de 2015

Yoga y Espiritualidad

El yoga en el siglo XXI  tiene su auge en la sociedad debido a la necesidad de llevar una vida sana, equilibrada y tranquila, el estrés, la obesidad, depresión y ansiedad llevan al a humanidad a buscar el espacio para reencontrarse y relajarse, es la alternativa perfecta para sanar todo tipo de padecimientos, pero va mucho más allá de simples posturas y estiramientos.



La práctica de yoga nos hace fluir con el tiempo, espacio, cuerpo, mente y espíritu a un viaje eterno en que el alma despierta a la conciencia para darle el toque divino del llamado universal. Es la sintonía magnifica que lleva a al ser a experimentar la grandeza de la creación, todo esto se resume a un despertar de la conciencia, el cual lleva a esa búsqueda
de identidad, de sensación y conocimiento de lo infinito. El cuerpo habla, la mente calla, la existencia y naturaleza fluyen en sincronía; ese es el verdadero significado de esta maravillosa disciplina.

La práctica lleva consigo el crecimiento espiritual, la devoción y entrega; el desapego y erradicación del ego; nada existe y todo fluye, el sendero de la vida liviana el paso y la energía colectiva difícilmente afecta nuestra armonía.

Vivir en un estado meditativo en una sociedad absorbente y estresante, fortalece la percepción de la realidad, llevándonos a dar importancia lo que realmente vale la pena... VIVIR!!!

Sat Nam, Namaste, Om, Bendiciones


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